9.9.09

Ojos líquidos

Los ojos de Nyx reflejaron la furia que sintió al ver al Barón entrar en su salón. Los músculos de su cuello se tensaron y apretó el mentón. Las pecas de su nariz casi desaparecieron con el sonrojado de su piel.

¿Cómo pudo yacer con semejante desharrapado? ¿Cómo no pudo ver antes la sed de sangre en sus ojos? Aún no sabía por qué aquel hombre quería acabar con su vida, pero eso era cuestión de tiempo. La Reina lo siguió con la mirada, lo observó moverse, y en ese instante en que el hombre caminaba sobre el mármol pulido del palacio casi como si flotara sobre él, Nyx podría haber jurado sin equivocarse que la sangre azul corría por sus venas de la misma forma que corría por las suyas. ¿Por qué un verdadero noble venido desde tan lejos, querría acabar con su vida? Y, ¿qué significaba lo de aquella gitana? Esa joven zíngara que lo acompañaba como un mono enroscado a un árbol.

Pero dejó de observar al Barón, algo captó su atención. Como la sombra de una cola de ratón hace que el gato apunte hacia arriba con sus orejas y entorne los ojos, silencioso. De esta manera, Nyx observó cada vez más tensa cómo Níobe se medía con la pequeña gitana y tragó saliva con dificultad, aquello no le gustaba , de repente esa conversación no era para nada importante y ni siquiera oía qué decía Adara y qué replicaba el Barón. Sin embargo todos los presentes, en su mayoría la guardia real, escuchaba y observaba a ambos interlocutores con suma atención y con sus manos en las empuñaduras de sus espadas - por si acaso-. No obstante,  no era ni remotamente tan importante lo que hablaban como lo que estaba aconteciendo tras el Barón.

Sólo Nyx pudo ver cómo las miradas de Níobe y la zíngara proyectaban palabras y números, rayos de sol y de luna, murmuraciones de ultratumba, cánticos de ángeles caídos. Nyx empezó a ponerse en pie, tenía que detener aquello. Todo estaba yendo mal. Todo iba a salir mal. Quiso gritar, quiso avanzar hacia sus hermanas, quiso salvarles la vida... Pero su cuerpo quedó suspendido a un centímetro del suelo y su boca sólo se abrió a la mitad. Sus ojos se volvieron vidriosos, líquidos, lo cual no impidió que su mente captara todo lo que a continuación pasó.

5 comentarios:

Crystal dijo...

Malditas seáis!! No podéis dejarme así!! Más!!

C. Maltesse dijo...

"¿Cómo pudo yacer con semejante desharrapado?"...pues a nosotros no nos pareció que lo pasaste mal del todo, enigmática Nyx.


Barón Han Von Deck

Cattz dijo...

Me da yuyu que el barón hable en primera persona del PLURAL. No queda muy equilibrado...

C. Maltesse dijo...

Cualquiera mantiene, Catzz, el equilibrio psicológico cuando te esperan Niobe y Nyx juntitas, y no precisamente para decirte lo guapo que eres...


Barón Han Von Deck

^lunatika que entiende^ dijo...

¡Joder!
Por favor, acabar con esto, que es mala leche dejarnos en ascuas así..!
Ains...